¿Sabías que el sentido del olfato es el que mayor poder evocador tiene de todos? Esto es así porque los olores pasan directamente desde la nariz al sistema límbico, que es la zona del cerebro donde se encuentran las emociones más primarias. No pasan por la zona más racional.
Olemos, reconocemos y recordamos gracias a la memoria sensorial, que es la habilidad de retener impresiones de información sensorial después de que el estímulo original haya cesado.
El poder de los olores es tan intenso que a ellos asociamos momentos de nuestra vida, personas o lugares visitados. ¿Recordáis el olor de los veranos en el pueblo, de la casa de los abuelos o del césped recién segado?, ¿y del mar?, el olor a sal del paseo por el puerto o de los barcos de los pescadores descargando al atardecer. O el de la casa de los amigos, o la nuestra propia, ¿a que no huele igual por la mañana, que cuando volvemos por la noche, con el olfato enriquecido de todos los olores acumulados durante el día?
Dicen los expertos que los humanos recordamos el 35% de lo que olemos y que somos capaces de diferenciar miles de olores diferentes. En la región donde nació Perfumes Rioja y tenemos nuestra sede física, lo sabemos bien, gracias al desarrollo un poco especial que los riojanos tratamos de practicar con los vinos que se elaboran aquí, por ejemplo. Cada vino contiene unas notas diferentes (madera, regaliz, frutos rojos….), al igual que los perfumes, con sus notas de salida, de corazón y de fondo.
En suma, olemos, recordamos, sentimos y, finalmente, vivimos con las evocaciones que nos proporcionan los sentidos, especialmente el olfato. ¡Sintamos y vivamos con plenitud!
Somos lo que comemos. Nuestro aspecto exterior y el de nuestra piel están condicionados por nuestros hábitos alimenticios. Por eso, y a modo de ejemplo, del mismo modo que utilizamos un tipo de crema hidratante para cada tipo de piel, es interesante que conozcamos qué alimentos nos convienen o perjudican en función de nuestro tipo de piel.
En función de los tipos de piel más generales (normal, grasa, seca o con acné), los expertos recomiendan los siguientes alimentos:
Piel grasa: Dieta abundante en verduras, pobre en grasas, azúcares y féculas. Como sabéis, además de la alimentación, son muy efectivos los tratamientos a base de masajes y mascarillas.
Piel seca: Alimentación rica en antioxidantes, vitamina C (cítricos), E (brócoli, espinacas, aceites vegetales, nueces o almendras y A (hígado, zanahorias, brócoli, mantequilla, espinaca, calabaza, bacalao, melocotones o guisantes).
Piel normal: Alimentos ricos en antioxidantes (uva negra, nueces, manzana, cebolla, té verde, pimientos, tomates, limón, zanahoria y ajo), vitamina C (cítricos), vitamina E (aceite de oliva y frutos secos). Omega 3 (pescado azul y aceites vegetales), ácidos grasos omega 6 (cereales, pan integral, huevos y aves, soja y aguacate)
Piel con acné: Son favorables los alimentos ricos en vitamina C, A y E, así como alimentos ricos en azufre (ajos y cebollas) y en zinc ( mariscos, huevos o hígado). Dentro de estas mismas recomendaciones y para evitar el colesterol, podemos optar por las berenjenas, espárragos o patatas.
Cuidar lo que comemos no cuesta mucho y sus beneficios merecen la pena, si además de atendernos por dentro, utilizamos una cosmética adecuada, el resultado brillará doblemente. Por cierto, no os olvidéis que todavía tenemos abierta nuestra promoción de cremas hidrantes y reparadoras, finaliza el próximo lunes, 7 de octubre.